Miles de años atrás los incas construyeron un camino similar a una espina dorsal hecha de rocas; la ruta atraviesa la parte sur del continente americano. Seis cancilleres pidieron que la zona sea declarada patrimonio de la humanidad. El Camino del Inca (conocido en el mundo andino como Qhapaq Ñan) recorre Argentina, Chile, Bolivia, Perú, Ecuador y Colombia. Atraviesa la región de sur a norte.
En cada nación queda una huella profunda de la cultura incaica que imperaba en los tiempos precoloniales. Están las reliquias arqueológicas de Cusco (Perú), las ruinas de Ingapirca en Ecuador, los vestigios de Quilmes en Argentina y, principalmente, la ruta en el Choro en Bolivia, entre otros sitios.
Durante la XX Cumbre Iberoamericana en Argentina, los cancilleres de Perú, Ecuador, Bolivia, Chile, Colombia y de Argentina firmaron una Declaración conjunta para que la zona sea declarada Patrimonio de la Humanidad. “La firma de este acuerdo al más alto nivel es un acto político de gran trascendencia, a la altura de la inmensidad y el valor universal excepcional del Qhapaq Ñan”, reseña parte del texto.
Según las agencias internacionales, se establecerá por primera vez un plan de gestión integral para salvaguardar al mismo tiempo un patrimonio natural y un patrimonio cultural que incluirá las tradiciones indígenas y locales. Se trata de proteger el sistema de forma integrada y promover con ello una cooperación que abarque en su conjunto un itinerario cultural de dimensión continental. “Los incas supieron articular todo el conocimiento andino y enlazar con acierto redes de caminos regionales que habían empezado a formarse 2.000 años antes, y lograron dotarlas de coherencia funcional, al servicio de un Imperio, jalonándolas de centros de producción, establecimientos de comercio y lugares de culto”, agrega el documento.
Los Comités Nacionales del Qhapaq Ñan de los seis países se reunirán con los funcionarios del Centro de Patrimonio de la Unesco para que la declaración de Patrimonio Cultural de la Humanidad sea una realidad en el 2011.
El pasaje en el Choro
El paseo por la ruta precolonial del Choro se realiza en aproximadamente cuatro días. Ante los ojos de los visitantes se despliega una serie de paisajes. En el comienzo del camino se debe ascender a más de 4.700 metros de altura. Después de llegar a la cima del cielo empieza el descenso hasta ingresar a los valles yungueños. Los senderos casi interminables hechos de piedra... las caminatas por parajes verdes y el cruce de los ríos a través de los puentes colgantes... son sólo algunos de los motivos para compartir esta aventura a pie.
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